
Resumen del libro Superfreakonomics por Stephen J. Dubner y Steven Levitt
Resumen corto: Superfreakonomics Enfriamiento global, prostitutas patrióticas y por qué los terroristas deberían contratar un seguro de vida nos explica como desarrollar nuestra creatividad para encontrar soluciones poco obvias a problemas complicados, como aprender a entender los datos y pensar como un economista para acercarnos a la ‘’verdad’’. Por Stephen J. Dubner y Steven Levitt
3 de las ideas principales del libro
- Las recompensas nunca son tan dulces como nos gustaría
- Cómo mejorar nuestra capacidad de resolver problemas
- La clave para encontrar buenas respuestas es tener suficiente información
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Las recompensas nunca son tan dulces como nos gustaría
Tal cómo mencionamos en el libro de Freakonomics, nuestras decisiones suelen estar controladas por incentivos, es decir promesas de recompensas que creemos que nos van a satisfacer.
El problema es que muchas veces olvidamos que los incentivos no suelen ser tan buenos como nos esperamos. Esto se debe a lo que Dubner llama consecuencias inesperadas que básicamente hacen referencia al bias del coste hundido.
El coste asociados a una acciones, está formado por el coste que vemos y el coste hundido y ambos forman el coste real.
El coste que vemos está determinado por nuestras experiencias por lo que hemos vivido, y lo que hemos aprendido y por lo tanto es altamente subjetivo. El costo hundido es el coste que no somos capaces de imaginar pero que en la mayoría de los casos existe
El problema con trabajar basándonos en incentivos es que estos casi nunca serán tan buenos como nos imaginamos, simplemente porque no tenemos en cuenta el coste hundido asociado y por lo tanto seguramente requieran más esfuerzo, dinero o tiempo del que creemos.
Además este coste hundido, o coste escondido, de los incentivos puede tener efectos sobre nuestro comportamiento a largo plazo, ya que una vez que hacemos algo se hace mucho más fácil que lo repitamos o si hemos invertido en algo, es mucho menos probable que lo dejemos aunque nos este dando algunos problemas o pérdidas.
Y cuando creamos el hábito de hacer algo, se hace mucho más complicado eliminar esta acción de nuestra conducta.
Por eso, es muy importante pensar bien antes de tomar decisiones basadas en incentivos, sobre todo si nos lo propone otra persona, porque seguramente haya un coste mucho más grande de lo que esperamos.
Cómo mejorar nuestra capacidad de resolver problemas
Según Dubner y Levitt, la mejor forma de mejorar nuestras posibilidades de tomar buenas decisiones es con más información. La razón por la que no somos capaces de entender el precio real de los incentivos es que no tenemos experiencia con la situación y por lo tanto no podemos hacer una predicción correcta
Por eso, es importante estar informados, cuanto más sepamos de algo, menos probable es que vayamos a tomar malas decisiones, simplemente porque ya sabemos cuales son los errores mas típicos y como suelen afectar los bias en cada contexto por lo que es menos probable que cometamos un error.
Un ejemplo de esto sería responder rápido cuando alguien nos hace una pregunta que parece demasiado sencilla. Si pasa esto sabemos que no debemos responder con lo primero que se nos ocurre porque sería una respuesta usando lo que Daniel Kahneman llama el sistema 1, el de instinto primitivo que suele equivocarse en temas de lógica
En cambio, deberíamos esperar un poco y pensar, porque si hacemos esto, estaremos usando el llamado Sistema 2 que es el que nos permite usar la lógica y entender las ramificaciones dentro de la pregunta.
Simplemente con saber cómo funciona nuestra toma de decisiones podemos crear la oportunidad de mejorar nuestra probabilidad de ‘’acertar’’. Teniendo siempre en cuenta que toda decisión es una’’apuesta’’ en la que simplemente queremos maximizar no solo la posibilidad de responder sino reducir el gasto de tiempo y esfuerzo necesario para responder correctamente
Por eso, la clave para mejorar nuestra toma de decisiones está en saber cuando necesitamos más información y conseguir la necesaria cuando hace falta.
La clave para encontrar buenas respuestas es tener suficiente información
Antes de decidir si tenemos que buscar más información, debemos pensar en si esta decisión tiene el peso suficiente como para dedicarle tiempo, y si es así, debemos asegurarnos de buscar la información necesaria, que muchas veces será más de la que creemos, debido al llamado bias de las variables omitidas que es básicamente el hecho de pensar que tenemos suficiente información y no buscar más.
Un ejemplo de esto fue como se descubrió que era mala idea realizar partos después de trabajar con cadáveres. Los estudiantes de medicina siempre trabajan con cadáveres para aprender, y a veces algunos médicos han de realizar autopsias, el problema es que hace muchos años no se sabía de la existencia de las bacterias ni de su efecto
Esto llevó a que en muchos hospitales los médicos trabajasen con muertes y justo después realizarán partos, lo que a su vez significaba que morían muchas madres durante el parto, y al no tener información en el momento a muchos les eludía la causa.
Hasta que el doctor Ignaz Semmelweis investigó los hospitales con alta tasa de mortalidad durante el parto y los que tenían baja tasa, y se dio cuenta de que la diferencia principal era que unos se desinfectaban antes de operar, o hacían los partos primero, y los otros operaban sin prepararse.
Simplemente al recoger más información el investigador consiguió encontrar una respuesta que era novedosa para el momento y salvar miles de vidas.
Así que cuando una decisión sea importante hagamos al menos 3 rondas de búsqueda de información y con ello podremos limitar la probabilidad de equivocarnos.
