
Resumen del libro Mindfulness Guía práctica por Mark Williams y Danny Penman
Reseña/Sinópsis: Mindfulness (2011) lleva a los lectores a través de un programa de meditación de ocho semanas diseñado específicamente para brindar una mayor tranquilidad. Este libro es el resultado de una colaboración entre un bioquímico y un psicólogo clínico, que allana el camino hacia un mayor bienestar mental mientras desacredita numerosos mitos en el camino.
¿Quién es Mark Williams?
Antes de jubilarse, Mark Williams era profesor de psicología clínica en la Universidad de Oxford. Fundó la Academia de Terapia Cognitiva y escribió el libro The Mindful Way Through Depression en 2007.
¿Quién es Danny Penman?
Danny Penman tiene un doctorado en bioquímica y ha escrito para publicaciones como el British Daily Mail.
Colección de los mejores libros de Mindfulness, Psicología y Filosofía (PDF)

El mindfulness en la actualidad
La atención plena ha recibido mucha atención recientemente. A pesar de toda la cobertura de las revistas, todavía hay muchos conceptos erróneos y suposiciones incorrectas sobre qué es y para qué sirve. Es una pena, porque estos mitos suelen desanimar a la gente.
Uno de los más comunes es la noción de que es una religión. No lo es, a pesar de que es una práctica común en muchas religiones. El mindfulness es una técnica de entrenamiento mental que trabaja con una amplia gama de creencias e ideas.
Otra creencia erronea es que para practicar mindfulness, debemos sentarnos en el suelo con las piernas cruzadas, Pero en realidad esto no es más que una de las formas más populares, y cada uno puede hacerlo como quiera siempre y cuando le permita concentrarse en algo.
Otro mito es que hace falta meditar durante horas, pero en realidad podemos estar atentos durante un minuto o un día entero: la decisión es totalmente nuestra. Se ha demostrado que la atención plena nos ayuda a enfocar nuestras mentes, por lo que cuanto más practiquemos mejor, pero todo dependera de nuestros objetivos y necesidades.
Ahora que hemos desmentido algunos mitos, echemos un vistazo a lo que es la atención plena. Esencialmente, todo se reduce a observar nuestros pensamientos y los sentimientos que provocan de la misma forma que observamos el cielo, sin juzgar.
Consideremos un ejemplo de el día a día. Empezamos a pensar en cómo nuestro compañero fue grosero con nosotros más temprano en el día cuando volvíamos a casa del trabajo. Cuando lleguemos a casa, podríamos enviar un correo electrónico enfadado expresando nuestro descontento con su comportamiento. Pero, si dedicamos algo de energía a meditar sobre ello, nos daremos cuenta de que hacerlo es una pérdida de tiempo, y que seguramente nuestra irritación probablemente esta causada por alguna otra razón.
La capacidad de dejar de lado la negatividad es de lo que se trata la atención plena. Nos ancla en el ahora y nos mantiene enfocados en lo que está pasando en este momento.
Los beneficios del mindfulness
Se ha demostrado que la atención plena mejora la salud física y alivia el dolor. Consideremos los hallazgos de un estudio de 2003 publicado en la revista médica estadounidense revisada por pares Psychosomatic Medicine.
Descubrieron que la atención plena fortalecía el sistema inmune, previniendo y tratando la gripe, los resfriados y otros virus. Pero eso no es todo. Otro estudio, publicado en 2008 encontró que la meditación consciente puede ayudar con el dolor crónico. También está la depresión.
Según un estudio realizado por el profesor belga Kees van Heeringen, los participantes tenían menos probabilidades de recaer en la depresión cuando combinaban la atención plena con antidepresivos, y la probabilidad general de recaída bajaba del 68 al cero por ciento
La atención plena es un buen antídoto contra el estrés diario. Un estudio publicado en 2006 descubrió que la práctica regular de la meditación consciente reducía la ansiedad, la irritabilidad y la depresión.
En 2007, otro grupo de científicos dirigido por el psicólogo Amishl Jha descubrió beneficios mentales adicionales. Según sus hallazgos, la atención plena mejora la memoria, los tiempos de reacción y la resistencia física de sus practicantes.
Para acabar, un artículo publicado en 2007 en la revista Social Cognitive and Affective Neuroscience por Norman Farb y sus compañeros descubrió que la meditación fortalece y expande la parte del cerebro responsable de la empatía. Eso es importante porque la empatía no solo significa que somos más compasivos con los demás, sino también con nosotros mismos, lo que mejora nuestro bienestar general.
Solemos vivir en modo automático
Cuando no estamos practicando mindfulness estamos viviendo de forma ‘’inconsciente’’, esto significa básicamente que nos estamos dejando llevar por elementos que no entendemos o que a veces ni siquiera sabemos que están allí, como por ejemplo por los bias.
Esto está relacionado con el hecho de que hasta el 40% de nuestras acciones son controladas por nuestros hábitos, es decir las hacemos de forma inconsciente, y esto significa que a menos que tengamos muy buenos habitos, que no suele ser el caso, es muy probable que estemos desperdiciando una gran cantidad de tiempo y posibilidades
Por eso, para evitar ser controlados por nuestro subconsciente y por hábitos que muchas veces no hemos elegido y no nos ayudan, debemos aprender a desarrollar nuestra capacidad de mindfulness.
Si aprender a estar presentes, entender que nos afecta y controlarlo, podemos tomar las riendas de nuestra vida, dejar de ser controlados por malos hábitos y crear buenos hábitos y a partir de allí crear las condiciones necesarias para cumplir con nuestros objetivos.
Si conseguimos hacer esto podemos mas que duplicar el tiempo que tenemos para hacer trabajo de verdad que nos llena, en lugar de desperdiciar nuestro tiempo. Trabajar nuestra capacidad de mindfulness nos permitirá empezar a entrenar nuestra inteligencia emocional, y dejar de ser controlados por lo que Daniel Kahneman llama el sistema I
