Resumen del libro Leadership Strategy and Tactics Field Manual por Jocko Willink
Reseña/Sinópsis: Estrategia y tácticas de liderazgo (2020) nos enseña cómo aplicar las habilidades de un equipo Navy SEAL en nuestra empresa. Aprenderemos sobre prácticas como la propiedad extrema y descubriremos por qué la humildad es mejor que la arrogancia. Estos consejos nos ayudarán a dejar nuestro ego en la puerta y recordar que el éxito de nuestro equipo siempre debe estar por encima del éxito personal.
¿Quién es Jocko Willink?
Jocko Willink fue un oficial de la Marina SEAL durante la batalla de Ramadi, en Irak, liderando lo que se convertiría en la unidad de operaciones especiales decoradas en la guerra de Irak. Ahora dirige una empresa de asesoramiento de liderazgo que enseña a los líderes empresariales a construir sus propias equipos de alto rendimiento.
Además de su consultoría Willink también es entrenador de Jiu-Jitsu Brasileño, autor y conocido creador del podcast ”Jocko Podcast” en el que trata temas que según él son el ”lado oscuro” del mundo.
Uno de los capítulos que más recomiendo de su podcast es en el que trata el tema de la depresión con Tim Ferris.
Además del podcast Jocko cuenta con una empresa de entrenamiento de liderazgo conocida como ‘Echelon Front” y que fue la que le llevó a escribir este libro.
Según Jocko el libro de ”Extreme Ownership” es un manual que compila lo que aprendió de liderazgo durante la guerra y lo que usa para entrenar a sus clientes.
Su libro Discipline Equals Freedom (2020) o en español La Disciplina es la Clave para la Libertad es nuestra guía para el arte de la autodisciplina. El libro nos explica lo que podemos hacer para sacar más partido a nuestra vida, y acercarnos a nuestras metas, a través de mejorar nuestras herramientas en la batalla contra la procrastinación.
Su libro Extreme Ownership nos presenta una nueva forma de ver el liderazgo basada en asumir la responsabilidad de todo el proceso, si algo sale mal es culpa nuestra.
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A veces necesitamos dar un paso hacia atrás para ver las cosas con claridad
Imagine la escena. Un equipo de Navy SEAL está en una misión de entrenamiento. Tienen la tarea de asaltar una zona en alta mar, pero las cosas no van como lo planeado. A medida que se acercan a la plataforma, el equipo se encuentra congelado en su posición, disparando, esperando que alguien tome una decisión sobre la mejor forma de avanzar.
El problema es que al llegar hay demasiados lugares para que los posibles enemigos se escondan en esta plataforma y muy pocos lugares para que el equipo de SEAL encuentre una cubierta protectora. el tiempo se agota, y todo lo que cualquiera puede hacer es lo que está capacitado para hacer en esta situación: buscar objetivos.
Pero cuando buscamos objetivos, todo lo que vemos es lo que está en la mira de nuestro arma. Nos confirmamos en el panorama general. Para avanzar, alguien del equipo necesita separarse.
Afortunadamente para el equipo de SEAL, tenían a alguien que podía dar un paso al frente y hacerse cargo: el autor, Jocko Willink sabía qué hacer. Para controlar la situación, Willink dio un paso atrás, y miró bien a su alrededor. Este movimiento le permitió ver la imagen completa.
Podía ver los obstáculos que se avecinaban y el camino que debía tomar el equipo. Fuera de su vida como SEAL de la Armada, el autor descubrió que abstraerse de una situación es una de las mejores herramientas de un líder.
Esto nos ayudará a conectarnos con el ahora y nos pondrá en un lugar mejor para tomar una decisión racional.
El buen liderazgo se deriva de dos componentes fundamentales: la dicotomía del liderazgo y aceptar nuestra responsabilidad.
Cuando el autor habla sobre el liderazgo, a menudo esperan que comparta un enfoque muy directo del liderazgo. Esperan un enfoque basado en una jerarquía estricta, donde la gente simplemente hace lo que dice, sin hacer preguntas Pero la realidad de lo que hace a un buen jefe, en el mundo industrial o empresarial, no es tan simple como eso.
En esencia, el liderazgo exitoso consiste en crear relaciones sanas de confianza y respeto mutuos. Solo haciendo esto podemos llevar a un equipo motivado y dedicado a la victoria. No sucederá si somos inflexibles y no escuchamos las ideas de nuestro equipo.
Un líder exitoso es un líder respetado, y para que eso suceda, las personas del equipo también deben sentirse respetadas y protegidas. Cuando se trata de ganar este respeto, quizás más que cualquier otra estrategia, el autor cree en aceptar la responsabilidad.
Aceptar la responsabilidad significa reconocer todos los problemas, apuestas y planes fallidos. Esto significa asumir la responsabilidad de las cosas malas, sin excepción. Si un miembro del equipo comete un error, llega tarde o no hace su trabajo, el error es nuestro.
Su fallo refleja el hecho de que no nos hemos comunicado adecuadamente. O tal vez signifique que no hemos comunicado de forma efectiva la importancia de su función y cuán esencial es para el éxito general del equipo. En última instancia, el fracaso de un proyecto de equipo recae únicamente sobre los hombros del líder.
La importancia de ser adaptable
Es normal que no todo lo que pensemos vaya a funcionar, pero esto no significa que no sea útil. Hacer algo permite aprender, y muchas de las nuevas tendencias siempre están conectadas, de forma que sacar partido a una de ellas permite que saquemos partido a muchas más de ellas.
La adaptabilidad y la flexibilidad son las cualidades que permiten el aprendizaje y sacar partido incluso de lo que otros considerarian un fracaso. Un ejemplo de esto, es el caso de Alan Greenspan, uno de los principales proponentes de la desregulación de los mercados, mercados libres.
Como presidente de la reserva Federal desde 1987 a 2006, su deseo por crear un mercado libre llevó a que cayesen las tasas de interés en el 2004. Muchos pensaron que esto llevaría a tasas de crédito que no se podrían sostener, pero aun así mantuvo su política y el resultado fue una de las mayores crisis, la del 2008.
Esto nos demuestra como la falta de adaptabilidad puede causar problemas catastróficos para nuestras organizaciones e incluso para el mundo. Hay que entender cuando algo puede salir mal, y prepararse para evitar que sea el caso. Según el autor, los líderes han de tener una visión en la que creen pero estar dispuestos a cambiarla si las condiciones lo requieren.
En concreto, nos recomienda hacer uso del llamado premortem, la práctica de pensar en el peor caso posible y que medidas tomariamos para evitar que todo cayese en esas situaciones.
Un ejemplo de como hacerlo es el de Shell, que contrató al analista Pierre Wack y les ayudó a prepararse para todos los posibles problemas que podrían tener en los próximos 10 años. El resultado fue que cuando se dio el embargo de petróleo en 1970, Shell no sufrió grandes daños.
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