
Resumen del libro La Vida Secreta del Cerebro Cómo se Construyen las Emociones por Lisa Feldman Barrett (How Emotions Are Made)
Resumen corto: How Emotions Are Made o en español La Vida Secreta del Cerebro: Cómo se Construyen las Emociones nos explica la ciencia de las emociones, como se crean y los principios que las gobiernan. Por Lisa Feldman Barrett
¿Quien es Lisa Feldman Barrett?
Lisa Feldman Barret es una catedrática de psicología de la universidad de Northeastern en Boston y TED speaker . Ha recibido numerosos premios por su investigacion en el campo de las emociones entre ellos el NIH Director ‘s Pioneer y es miembro de la Royal Society of Canada.
Ha tenido menciones honorables en la Escuela de Medicina de Harvard y el Hospital General de Massachusetts. Barrett consiguió el Premio Pioneer de los Institutos Nacionales de Salud por su investigación sobre las emociones en el cerebro y ha publicado más de 200 artículos científicos que han aparecido en Science, Nature, Neuroscience y otras revistas de alto impacto de psicología y neurociencia.
Es la creadora de la teoría de las emociones construidas que explora como se crean las emociones y cómo nuestra cultura y experiencias le afectan, temas que nos presenta en su libro ‘’La Vida Secreta del Cerebro’’
3 de las ideas principales del libro Cómo se Construyen las Emociones por Lisa Feldman Barret
- Las emociones en la actualidad
- La ciencia de las emociones
- Cómo nacen las emociones
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Las emociones en la actualidad
La visión típica de las emociones es que son como actos reflejos, algo que no podemos controlar. Esto nace del punto de vista clásico de cómo nacen las emociones y de cómo son algo espontáneo que ‘’nos acerca a quien somos de verdad’’, y que por lo tanto tienen un alto factor de irracionalidad.
Esta visión clásica ha sido adoptada por muchos pensadores a lo largo de la historia, desde Aristóteles, Buda, Darwin, Descartes y Freud, hasta pensadores modernos como Steven Pinker, Paul Ekman y el Dalai Lama. Esta visión pasiva de las emociones se enseña en los libros de texto de psicología y se refleja en cómo los medios las discuten.
Se cree que hay un conjunto de emociones que se pueden encontrar en toda la humanidad y que cada una de ellas tiene una propiedad o «esencia» subyacente. Este concepto se llama esencialismo. Asume que cada uno de nosotros no solo es igualmente emocionalmente expresivo, sino que también es capaz de reconocer automáticamente las mismas emociones en los demás.
Es como si el cerebro estuviera precableado con neuronas para emociones específicas. Una vez que se activan las neuronas, producen respuestas físicas. Y es a través de ellas que se identifican las emociones. Imagina que tenemos un compañero molesto. Activará «neuronas de la ira», lo que en consecuencia hará que “nuestra sangre hierva”.
Se suelen explicar como algo con lo que nacemos, y que recibimos como resultado de nuestro desarrollo como Homo Sapiens, y que cada región de nuestro cerebro controla algún tipo de emoción, de forma que todos sentimos las cosas de la misma forma.
Esta es la visión más tradicional sobre el funcionamiento de las emociones, pero la realidad es diferente. Las emociones en realidad se pueden expresar de distintas formas y no hay una única forma de “sentir”.
Esta es la razón por la que tenemos tantas palabras para expresar sentimientos que son sutilmente diferentes. Existen porque realmente son emociones diferentes que dependen de quién seamos y de lo que hayamos experimentado. Cada emoción es única y depende del contexto
Además se ha visto que las emociones no se producen en regiones concretas del cerebro, sino que en realidad nacen del trabajo conjunto de múltiples regiones, regiones que pueden variar según nuestras experiencias. No hay una región concreta de “emoción universal”.
La ciencia de las emociones
La teoría que ha nacido para sustituir a nuestra forma de ver las emociones es lo que se conoce como la teoría de las emociones construidas o “theory of constructed emotion”.
¿Qué es la teoría de las emociones construidas?
La teoría de las emociones construidas, propuesta por Feldman, defiende que las emociones nacen de forma espontánea como resultado del trabajo conjunto de varias regiones del cerebro trabajando a la vez.
Además defiende que las emociones cambian entre individuos, de forma que cada persona sentirá y vivirá las situaciones de una manera sutilmente diferente. Nuestros sentimientos nacen de procesar la información que conseguimos, basándonos en nuestras experiencias, y crean una respuesta que parece correcta para la situación.
Estos fueron los hallazgos de la autora en su Laboratorio Interdisciplinario de Ciencias Afectivas. Los científicos analizaron las imágenes cerebrales realizadas entre 1990 y 2011. Dividieron el cerebro humano en diminutos cubos virtuales como píxeles 3D y calcularon la probabilidad de una mayor activación cerebral dentro de cada cubo, mientras que el paciente experimentaba miedo, tristeza, ira o felicidad.
Descubrieron que cada región de «emoción» del cerebro también aumentaba en actividad durante los pensamientos y percepciones no emocionales. De forma que demostraron que, aunque existen patrones expresivos de las emociones dentro de la sociedad, no existe una respuesta única.
La principal diferencia de esta teoría está exactamente en esto, las emociones de cada persona serán diferentes, porque cada persona tiene experiencias diferentes. Esto significa que nosotros mismos vamos creando nuestras emociones a medida que nos desarrollamos como persona, a medida que creamos hipótesis sobre cómo funciona el mundo y las vamos testeando con la realidad
Por eso podemos cambiar con el tiempo, por eso podemos modificar lo que sentimos respecto a ciertas cosas. Y por esto mismo siempre podemos seguir mejorando. Porque al final nuestro cerebro es moldeable, gracias a la neuroplasticidad, y por ello podemos cambiar para acercarnos cada vez más a nuestro ideal.
Cómo nacen las emociones
Según Feldman, uno de los factores que puede tener el mayor efecto sobre nuestras emociones es el factor cultural. Esto se debe a que la cultura influencia en gran medida a cómo vivamos nuestra infancia y por lo tanto controlara hasta cierto punto qué experiencias podemos llegar a vivir.
Un ejemplo de esto es como culturas como la cultura Tahiti carece del concepto de tristeza y simplemente se refieren a ello como cansancio.
Nuestra forma de entender el mundo está controlada por nuestras experiencias y nuestro idioma y las palabras que usamos puede afectar a cómo interpretamos el mundo y por lo tanto a nuestras emociones y forma de pensar
Por eso es importante que elijamos con cuidado las palabras que usamos porque tal y como dicen en la cultura japonesa, las palabras tienen alma, kotodama de kotoba que significa palabra y damashi que significa alma hace referencia a como todo lo que decimos tiene “alma” y nos afecta más de lo que creemos. Es una forma en que la cultura japonesa ha encapsulado en una historia, la importancia de las palabras sobre nuestra forma de ver el mundo.
Esto se debe a lo maleable que es nuestra mente y lo fácil que es que nuestro contexto nos controle. Por eso, debemos hacer un esfuerzo por controlar aquellos elementos que podemos y hacer que vayan en la dirección que más nos pueda ayudar a lograr lo que buscamos.
Si usamos palabras llenas de energía seremos más proactivos, si usamos palabras que eliminan el término fracaso y lo convierten en aprendizaje podremos seguir adelante sin importar que pase, y si convertimos la disciplina en nuestra forma de vida podremos convertir nuestros ideales en realidad.
