
Resumen del libro Hábitos para ser un Crack por Jen Sincero (Badass Habits 2020)
Sinópsis/Resúmen corto: Badass Habits (2020) es una guía para desarrollar hábitos positivos, que nos presenta un enfoque paso a paso para romper viejos patrones y crear otros nuevos.
¿Quién es Jen Sincero?
Jen Sincero es coach, speaker motivacional y autora de múltiples guías de gran éxito de ventas para el desarrollo personal. Sus trabajos incluyen ¡Eres un crack!, You are a Badass Everyday, You are Badass at Making Money.
Colección de Los mejores libros de Productividad y Aprendizaje(PDF)


¿Cómo acercarnos a quien queremos ser?
Cada vez que Alice se entregaba a los dulces, se preocupaba por el aumento de peso y se sentía fatal. Algo tenía que cambiar. Dejó de comprar bocadillos y de tener atracones, buscó el consejo de dietistas e incluso vio documentales que demonizaban la sacarosa.
Estos pasos ayudaron, pero se sentía como si estuviera a un poco de estrés, o un bache, de volver a caer en sus viejas costumbres. Al final, Alice no tuvo que cambiar sus acciones sino su identidad. Tenía que convertirse en una persona que no comiera azúcar, porque para cambiar nuestros hábitos, debemos cambiar quiénes somos.
Un hábito es una rutina, acción o comportamiento en el que nos involucramos una y otra vez. Esencialmente, es lo que hacemos cuando funcionamos en piloto automático. Los hábitos pueden ser patrones positivos, como ponerse el cinturón de seguridad al conducir, o destructivos, como perder procrastinar.
Los hábitos funcionan conectando una señal a una respuesta, y luego conectando esa respuesta a una recompensa. Consideremos un hábito como el ejercicio diario. El desencadenante podría ser escuchar la alarma del teléfono. La respuesta sería ir y levantar unas pesas o hacer algo de cardio. ¿Las recompensas? La ráfaga de endorfinas y una sensación de logro. Cuanto más seguimos esta secuencia, más automática y arraigada se vuelve.
Por supuesto, probablemente no nos demos cuenta de que la secuencia está teniendo lugar, muchos de nuestros hábitos son inconscientes. El primer paso para realizar cualquier cambio en nuestras rutinas es identificarlas. Para hacer eso, debemos entender nuestras acciones y los pensamientos y sentimientos asociados con ellas. Para alguien como Alice, esto significaba mirar cuándo ocurren los atracones de azúcar. En su caso, y seguramente en el de la mayoría, la causa era el estrés.
Una vez que nos damos cuenta de las secuencias detrás de nuestros hábitos podemos alterarlos conscientemente. Esto requiere redefinir nuestra identidad para adaptarla a los nuevos hábitos que queremos.
¿Cómo cambiar la forma en que nos vemos?
Digamos que estamos hartos de empezar el día de mal humor, y de quedarnos despiertos hasta tarde y despertarnos exhaustos, queremos despertarnos con una sonrisa y una desayuno sano. Estamos decididos a convertirnos en madrugadores.
Pero el mundo se interpone en el camino. Intentamos empezar a madrugar pero la vecina no apaga la tele o habla por teléfono toda la noche. Llegamos al trabajo pero en vez de avanzar con lo que teníamos pensado salen varios imprevistos, o tenemos que perder tiempo en reuniones interminables. Y para cuando acabamos, nos toca salir a tomar algo con unos amigos lo cual se va alargando hasta que es de madrugada. Volvemos a casa y ya no tenemos energía para nada, y asi acaba un día más.
Por supuesto que no tenía que ser así. Podríamos haber conseguido nuestras metas si hubiésemos aprendido a establecer limites. Los límites son la base de unos hábitos fuertes.
Para desarrollar nuevos hábitos debemos elegir una identidad y apegarnos a las acciones y comportamientos que esa identidad implica. Este proceso requiere que nosotros, y nadie más, permanezca en control de nuestro tiempo, energía y emociones. Si dejamos que las fuerzas externas influyan en cómo actuamos y nos sentimos, sera difícil que cumplamos con nuestras metas. Por eso es fundamental establecer límites.
Esto significa decidir conscientemente cómo interactuar con el mundo que nos rodea. Para ello, reflexionar sobre qué límites creemos que hay que establecer para perseguir nuestros objetivos es clave. Consideremos lo que haremos y no haremos, qué trato aceptaremos y no aceptaremos de los demás y qué factores están bajo nuestro control.
A menudo, encontraremos que estas barreras no están tan definidas como deberían. Si nuestro objetivo es volvernos vegetarianos, probablemente no deberíamos aceptar una invitación a un restaurante de parrilladas.
Tal vez sugerir un lugar diferente en su lugar nos ayudaría a seguir disfrutando de la situacion sin preocuparnos por no poder comer. O, si nuestra meta es mantenernos más tranquilos y centrados, probablemente podamos evitar quedar atrapados en el último drama de las redes sociales reduciendo nuestro consumo.
Al principio, establecer estos nuevos límites puede ser un desafío. Da miedo defendernos cuando estamos acostumbrados a ir con la corriente. Una buena forma de practicar es empezar poco a poco. de
¿Cómo crear nuevos hábitos?
Dediquemos un momento para escribir una lista de hábitos que nos gustaría desarrollar o cambiar. Esto podría ser cualquier cosa, desde comer de forma más saludable hasta la meditación diaria o llamar a nuestros padres con más frecuencia. Ahora; consideremos por qué hemos elegido estos hábitos. Intelectualmente, sabemos que una dieta equilibrada brinda muchos beneficios, pero probablemente también haya algo más profundo en juego.
La verdad es que nuestras acciones están impulsadas tanto por el pensamiento racional como por la energía emocional. Es más probable que cualquier nuevo hábito se vuelva parte de nuestra rutina y automático cuando estamos motivados tanto por la razón como por la pasión. También es importante entender los beneficios que nos brindan estos nuevos hábitos, cuantas más ventajas tienen y cuanto más apegados estemos emocionalmente a estas ventajas, más fácil será que se conviertan en parte de nuestra rutina.
Centrarse en estos deseos más profundos es más eficaz que fijarse en los hábitos reales. Cuando elegimos qué hábitos seguir, es importante elegir los que están conectados con lo que queremos ser. Cerramos los ojos e imaginamos nuestro «yo» ideal.
¿Nuestro nuevo hábito nos ayuda a llegar allí? Si no, va a ser muy difícil mantenerlo. Perseguir nuestro «yo» ideal no es fácil. A veces, los deslices y contratiempos nos hacen dudar de que queremos un nuevo hábito. Es importante recordar que estas cosas pasan. nos desviaremos, incluso si queremos algo. Lo importante es perseverar.
